Las mimosas han teñido de amarillo la entrada de la Sierra de la Estrella de Covilhã. Las buenas temperaturas han hecho florecer muchas plantas y árboles entre los que se encuentran estas leñosas destacadas por sus flores amarillas en forma de esfera.
El jardín de la montaña muestra su esplendor con cada cambio estacional, en este caso con un color llamativo que capta la atención de quienes quieren dirigirse al punto más elevado de la Portugal continental en busca de la nieve que este carnaval luce por su ausencia.
No obstante, quienes se aventuran a realizar este viaje se encuentran con un bello paisaje, vistas infinitas y parajes naturales que conservan toda su esencia gracias a que la mano del hombre casi no ha actuado sobre ellos debido a la situación en la que se encuentran y la escasez de condiciones para el cultivo en dichos espacios.
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